Con la llegada del buen tiempo, las novias van despidiéndose de las medias y de los zapatos cerrados: ha llegado el momento de llevar sandalias y con ellas poder lucir una bonita pedicura. A pesar de que debemos cuidarnos uñas de manos y pies todo el año, esta época es especialmente necesario que cuidemos nuestros pies, y más si nos vamos a casar.
Durante la boda, todas las miradas irán destinadas a tus manos. Pero de manera inevitable, si decides llevar un zapato abierto, también mirarán tus pies. Si a esto le sumamos los baños de sol en la luna de miel, los paseos románticos con un look playero en sandalias… vamos a necesitar una bonita pedicura para nuestra boda.
Lo mejor sería darte un homenaje una vez al mes (o como mínimo cada tres meses) y dejar que sean los profesionales quienes se encarguen de hacerte una pedicura en profundidad. Además de tener unos pies bonitos, estaremos evitando problemas como las uñas encarnadas, algo muy doloroso y desagradable. Si no sueles hacértela habitualmente y tus pies son un desastre, deberías acudir a realizarte la pedicura unas tres veces antes de tu boda, de esta manera todos los problemas desaparecerán.
Entre los preparativos de boda, deberías incluir la pedicura uno o dos días antes de la boda, nunca el mismo día, así, el aspecto de la pedicura será perfecto y no sufrirás los inconvenientes de dejarlo todo para el último día y así arruinar el acabado final de tus uñas.
A la hora de escoger la pedicura, las novias siempre suelen acabar escogiendo una de las siguientes opciones:
- Utilizar el mismo tono que el escogido para la manicura, el cual suele ser suave y sutil.
- Escoger un tono totalmente diferente al de su manicura, mucho más radical. Este suele ser el rojo, aunque hay muchas novias que se atreven con otras tonalidades.
A la hora de escoger la pedicura que lucirás el día de tu boda, debes centrarte en varios aspectos a la hora de decidir: tu personalidad, el look nupcial y el contexto de la boda. Dedica unos minutos a ello y consulta con amigas y profesionales, ellos sabrán ayudarte a escoger la pedicura que más te convenga.
Las opciones que tienes en cuanto a la técnica son las mismas que se presentan para la manicura:
- Pedicura normal
- Pedicura permanente
- Pedicura en gel
Deberás decidir en función de tus necesidades:
- Si te gusta cambiar de color de uñas o solo las lucirás pintadas el día de tu boda, tu pedicura es la normal.
- Si no quieres ir cargada con material para cambiar el color de tus uñas, escoge la pedicura permanente. Además, las uñas de los pies crecen más lentamente que las de las manos, así que llevarás una pedicura perfecta varias semanas. Si tu luna de piel es en un destino costero, habrás escogido la mejor pedicura.
- En el caso de que tus uñas estén dañadas, lo mejor es que escojas la pedicura en gel. De esta manera cubrirás tus uñas y se verán perfectas.
Ahora que ya sabes todo lo que necesitas saber sobre la pedicura que lucirás el día de tu boda, no esperes al último día en pedir cita, ya que es una parte muy importante del look nupcial y no olvides comentar cual será o ha sido tu pedicura en el día de tu boda.