La tradición de las bodas es algo innegable, pero ¿y si tu nunca has querido tomar el protagonismo que requiere ser la novia? Ya sea por el carácter o la forma de ser, hay muchas chicas que no quieren ser el centro de atención de las miradas de todos los invitados. Para solucionar este problema, aunque es muy difícil, corre la tendencia de los estilos urbanos o de calle para las bodas.
Se trata de un estilo que no tiene mucha complicación pero que para nada pierde la fuerza que tiene que tener la novia. Este tipo de vestidos suelen ser de corte limpio y sencillos, que como podrás pensar, suelen llevarse más en enlaces civiles, pero algunos diseñadores han decidido lanzarlos a la pasarela para poder llevarlos en cualquier tipo de enlace.
Sin lugar a dudas, el detalle más romántico de este tipo de vestidos es el volumen de la falda, ya que el escote está prácticamente prohibido. El diseñador Jesús del Pozo encuentra un muy buen aliado en el volumen de los vestidos arquitectónicos. Con este tipo de vestidos, los zapatos cobran más protagonismo, y que el movimiento de la falda vaporosa, que en algunos casos tendrá largos irregulares (los cuales son muy cómodos al caminar) harán que los zapatos sobresalgan. Si escoges un color acertado, serás envidiada por muchas.
Si decides optar por esta tendencia, debes tener claro que el rostro tiene que quedar despejado, ya que la expresión y la mirada de la novia serán las más cargadas de expresividad, dando muchísima fuerza. Por lo tanto, el peinado debería ser recogido, además que con este tipo de peinados, las opciones son infinitas, pudiendo reforzar el minimalismo del vestido o conseguir una candidez muy adecuada.
Las novias urbanas no utilizan los bordados, el encaje ni los abalorios, en el caso de que quieran tener alguno de éstos detalles, serán muy discretos y colocados en el lugar adecuado. Hay diseñadores, como Rosa Clará, que propone en sus colecciones accesorios dorados.
Escoger este look para el día de tu boda, quizás haga alejarte de “lo aparatoso” de las bodas, pero no por ello estás renunciando a tu estilo y tu personalidad. Es tu boda, y tu eliges como quieres ir.