La elección del vestido de novia es sin duda alguna uno de los momentos más mágicos de una boda. Después de toda la dedicación, de todas las dudas, de todas las pruebas, etc. ya tienes tu vestido y es muy importante que todo este esfuerzo haya valido la pena, así que no dejes que una mala conservación de tu vestido arruine tu boda.
Hemos preparado para ti una serie de consejos de aplicación obligada para que tu vestido no llegue en malas condiciones hasta el día de tu boda. En esta ocasión vamos a hablaros sobre los cuidados previos a la boda. Toma nota para lucir espectacular en el que será probablemente uno de los días más felices de tu vida.
- Antes de tener el vestido. Antes de que llegue a tus manos, deberás tener en cuenta varios factores que repercutirán directamente sobre el estado y conservación de tu vestido de novia. Algunos ejemplos serían:
- Largo del vestido adecuado a estatura y tacones. Si lo vas a arrastrar lo acabarás rompiendo o ensuciando, especialmente en las bodas al aire libre.
- Lugar donde te casas. Si lo haces en la playa, tanto la arena como el agua salada podrían dañar y manchar la tela, especialmente la si es de seda.
- Los vestidos son entregados en un estado impecable, así que deberemos mantener este estado hasta el día de la boda. Es muy importante colgar el vestido de las tiras que salen de los lados de los vestidos, los de las costuras, y nunca colgarlos directamente de la tela, ya que se podría acabar deformando o hacer grande debido al peso.
- Además, antes de tener el vestido en casa, tendremos tener claro cuál será el trato que nosotras mismas le daremos al vestido y el que le darán las personas que vivan en nuestra casa o nos visiten, especialmente si se trata de niños. Lo mejor es hacer como si no estuviera para evitar problemas.
- Cuando vamos a recoger el vestido, la tienda en cuestión, debería poder facilitarnos un portavestidos de novia para evitar manchas. Bajo ninguna circunstancia deberíamos utilizar coberturas de plástico, ya que podría dañar el vestido.
- Trata de sacar el vestido el mínimo posible. En el caso de que debas hacerlo, lávate bien las manos antes de hacerlo y mantenlo fuera del alcance de niños, mascotas y situaciones comprometidas.
- Si crees que será necesario plancharlo antes de la boda, habla con la tienda de vestidos de novia que te lo vendió para ver si ellos ofrecen este tipo de servicios o podrían llegar a recomendarte algún sitio de confianza que ellos conozcan.
¡EL DÍA DE LA BODA!
El día de la boda vas a tener que extremar todos los cuidados que hayas tenido en los días previos al gran día. Ya has conseguido mucho manteniendo el vestido impoluto en casa, pero los momentos previos a la boda hay que tener mucha precaución ya que podrías mancharlo y ahora sí que no hay margen de error.
- Si necesitas un planchado exprés para tu vestido el mismo día de la boda, puedes recurrir a este par de trucos:
- Cuelga tu vestido en el cuarto de baño. Abre el grifo de agua caliente. Cierra la puerta. El vapor de agua se encargará de planchar el vestido.
- Coge el secador y dale aire caliente a más de dos palmos de distancia para que no se queme.
- La manicura y la pedicura serán tratamientos que deberás hacerte como mínimo un día antes de la boda para evitar manchas en el vestido. Intenta no comer nada mientras lleves el vestido puesto antes de la ceremonia, bebe agua.
- Los desodorantes y perfumes podrían crear manchas en la ropa, así que intenta aplicarlos antes de ponerte el vestido. Lo mismo pasa con el maquillaje. Lo ideal sería que te lo aplicara otra persona antes de ponerte el vestido, y que después te ayudarán a ponértelo. Los retoques que puedas hacerte después también sería ideal que los hiciera otra persona.
- Si tu vehículo de transporte es el coche, utiliza los asientos traseros para sentarte, de esta manera evitarás arrugarlo. Si tu vestido tiene cola, mete primero la cola y después siéntate tú y sobretodo no pilles la cola con la puerta del coche. No olvides caminar siempre hacia adelante, ya que si lo haces hacia atrás podrías pisarte la cola.
- Para acabar, si en el banquete te manchas, no intentes quitarlo con agua o productos quitamanchas, olvídate y disfruta de tu boda, ya lo llevarás a la tintorería para que lo arreglen.
