Aunque a día de hoy no sea una práctica muy habitual, son muchas las novias que se suman a los deseos de aumentar el tamaño del pecho para el día de su boda y así lucir un escote impresionante. Si eres una de éstas, ya sea porque es el momento ideal para hacerlo o lo consideras la excusa perfecta, deberás saber cuáles son las alternativas que existen en el mercado para el aumento de pecho.
Aumento con grasa propia
En primer lugar encontramos los aumentos de pecho con grasa propia. La técnica se denomina Lipofilling o lipoestructura. Consiste en realizar una liposucción en zonas como los muslos o el abdomen para conseguir grasa purificada y después infiltrarla en la zona deseada, que en este caso sería en el pecho.
Al tratarse de una sustancia propia del cuerpo, no produce alergias, rechazos ni reacciones. El proceso se realiza mediante anestesia local y en la mayoría de las ocasiones, la paciente puede volver a casa en tan solo unas horas. Después de la intervención la paciente deberá llevar una prenda de compresión específica. Es un relleno permanente.
Lo único negativo que podemos encontrar en este tratamiento, es que dependiendo del volumen al que queramos llegar, se tendrá que extraer una cantidad específica de grasa. De esta manera, las mujeres más delgadas no son buenas candidatas para este tratamiento. Al tratarse de un tratamiento permanente de relleno de grasa propia, en el momento en el que se engorda, también engordará la nueva localización, al igual que en el caso contrario, si adelgazamos también nos adelgazará la misma zona.
Aumento con prótesis de silicona
Sin duda alguna, es uno de los procedimientos más habituales a la hora de realizar un aumento de pecho. La técnica a la hora de introducir la prótesis tendrá que ver con la anatomía de la paciente y las recomendaciones del cirujano. Las incisiones normalmente se realizan en el pliegue que se encuentra debajo del pecho o la mitad inferior de la areola. En este lugar se crea un bolsillo por donde se introduce la prótesis.
Este tipo de intervención es para siempre y puede ser realizado en cualquier mujer, independientemente de la edad, lo único que hay que tener es una buena salud. Son muchas las mujeres que deciden operarse al año mediante este procedimiento.
Al tratarse de una intervención quirúrgica, la anestesia utlizada es la general. La paciente, si no ha sufrido ninguna complicación, podrá reincorporarse a su vida normal al cabo de una semana, presentando alguna molestia, puesto que el postoperatorio es más lento. Las prótesis que se utilizan no son para toda la vida, tendrán que cambiarlas en algún momento. En la actualidad su duración es de unos 20 años aproximadamente.
Aumento con Macrolane
Esta técnica consiste en infiltrar un gel a base de ácido hialurónico para aumentar el volumen. No utiliza cirugía. El ácido hialurónico es una molécula que se encuentra en el propio cuerpo, por lo que se integra de manera natural con la propia piel y no suele producir alergia.
Este material, es reabsorbible, así que puede llegar a durar como máximo unos 12 meses, según indican los fabricantes. La cantidad de ácido que se utiliza en las intervenciones es limitada, así que los aumentos suelen ser bastante ligeros.